La importación de papa sube 150% y persiste el déficit de producción
En 2019, Bolivia incrementó la importación de papa en 150 por ciento con relación a 2018, en su mayoría papa precongelada para restaurantes de comida rápida. El país siempre tuvo déficit de producción del tubérculo y hasta la fecha no logra cubrir toda la demanda.
En el país el consumo per cápita es de 109,7 kilos de papa y chuño por año, pero sólo produce 1,1 millones de toneladas y la demanda es de 1,2 millones. Este déficit se acentúa entre septiembre y noviembre, meses en los que ingresa de contrabando papa fresca de Perú, en una cantidad que oscila entre 35 mil y 45 mil toneladas.
En 2018, el país había importado 10,7 millones de kilos por 10,4 millones de dólares. En 2019, la cifra subió a 25,1 millones de kilos por 12 millones de dólares, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), procesados por el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).
El responsable Nacional de Proyecto Papa del Ministerio de Desarrollo Rural, Jorge Calderón, indicó que más del 90 por ciento de esta importación es de papa precongelada, que es destinada a los restaurantes que venden comida rápida.
Calderón explicó que todas las franquicias de comida rápida traen esta papa congelada de países, como Estados Unidos, Alemania, México. En cambio, otras cadenas y restaurantes nacionales lo hacen de países como Argentina, Perú, China, Chile y Brasil.
Perú es el principal proveedor, pues en 2019 se compraron de ese país 18 millones de kilos de los 25 que importó Bolivia. Calderón considera que esto se debe a que hay debilidad del sector para producir papa holandesa, Desiré, Jatun Puka y Cardinal, que se usan para hacer papa frita. De los 1,1 millones de toneladas que produce al año el país, el cultivo de la variedad Desiré apenas representa el 2 por ciento.
A eso se suma que hay empresas del país que importan papa peruana para pelarla, congelarla y venderla en el mercado local porque el tubérculo nacional tiene un alto índice de azúcar, indicó Calderón.
“La elevación en el porcentaje de importación se trata sólo de papa pelada precongela para hacer papa frita. Eso se debe a que los negocios de comida rápida han proliferado de forma acelerada”, dijo el funcionario.
Detalló que las zonas bajas de país, como los valles, son ideales para cultivar el tubérculo, incluyendo el que se destina a freírse. La Gobernación de Cochabamba tenía hace años un proyecto para producir, pelar y congelar la papa con los productores.
Baja
Pese a que en 2019 incrementó en 150 por ciento la importación de papa, esta gestión el panorama puede cambiar debido a la pandemia de la Covid-19. Hasta junio de este año el país sólo importó 2,7 millones kilos de papa congelada por un valor de 3,5 millones de dólares.
Esto se debe a que los locales de comida rápida permanecieron cerrados desde mazo hasta mayo y estos últimos dos meses sólo pueden entregar su comida por delíveri.