Juana, la chola millonaria
Juana Vidaurre (o Juana Arteche como también se la conoce) era hija ilegítima del entonces hombre más rico de Bolivia, Matías Arteche, llamado también "El Señor de Aullagas", quien había construido su fortuna gracias a sus minas en Colquechaca, de donde se extraía una plata con un 90% de pureza (pureza altísima).
Arteche murió bastante joven y ante esto, la viuda y la hija legítima del hombre, le dieron su parte de la herencia a Juana, quien se volvió millonaria de la noche a la mañana, la gente la llamaba "La Chola Millonaria" o "La Reina de las Minas".
Juana manejó la casa Arteche y las minas y con ese dinero logró acceder al poder político. Durante las elecciones de 1884, que representaban un nuevo inicio democrático en el país, se enfrentaron los liberales con su candidato Eliodoro Camacho, los Constitucionales con Aniceto Arce y los demócratas con Gregorio Pacheco.
Juana apoyó económicamente a Pacheco y con ese dinero lanzaron prebendas para conquistar adherentes, en pocas palabras, compraban votos con regalos y dinero; esto llevó a Arce a buscar otros patrocinadores para hacer lo mismo y así surgió la premisa de la campaña del “cheque contra cheque” de la cual salió ganando Pacheco y, en consecuencia, Juana.
Así que Juana obtuvo ganancias políticas con todo esto, y no le fue nada mal, pero la economía cambió y el precio de la plata, que en el pasado se cotizaba altísimo, descendió y dejó en la ruina a muchos mineros plateros que a lo largo del siglo XIX habían amasado inmensas fortunas, uno de ellos fue Juana.
Para 1900, el poder de los mineros de la plata había dejado de existir, una nueva generación política, los liberales, se llevaba la sede de gobierno a La Paz, y un nuevo ciclo económico daba espacio a nuevos ricos, uno de ellos, apellidado Patiño, pero ésa es otra historia.
Así la Juana, espero que les haya gustado.
La autora es coordinadora de contenidos y encargada del archivo histórico en RTP
Columnas de SAYURI LOZA