Los “cirujanos” arreglarán más de mil Niños Jesús para la Navidad
Los “cirujanos” estiman que este año restaurarán más de mil imágenes del Niño Jesús en los talleres o “clínicas” de la Feria Navideña, expresó ayer uno de estos artesanos, Álex Jallasa.
A tan sólo cuatro días de la Noche Buena, los 10 artesanos dedicados a la restauración de las réplicas del Niño Jesús en esta feria reciben decenas de pedidos para arreglar desperfectos de las imágenes. Estiman que cada uno reparará entre 100 y 150 hasta el próximo 24 de diciembre.
Hay de todo. Los Niños tienen los dedos de yeso rotos, los pies quebrados, las piernas desprendidas, la cabeza desportillada y los codos desgastados. Los que más arreglos necesitan son los niños cuzqueños, que además de un retoque requieren la reposición de su cabellera ondulada.
Por todo el trabajo detallado que hacen, estos artesanos son llamados “cirujanos”, pero también porque en estas fechas sus mesas están repletas de imágenes del Niño Jesús malogradas, como a la espera de entrar a una operación como en una clínica.
Álex y Marcelo Jallasa son dos hermanos dedicados a la restauración que ahora empiezan su jornada a las 9:00 y terminan a las 22:00 por la gran cantidad de pedidos que tienen para hacer arreglos.
Su taller se reduce a un par de mesas al borde de la avenida 6 de Agosto, rodeadas de comerciantes de artículos navideños, de compradores y del intenso tráfico vehicular del sector. Ahí, en medio del bullicio, dejan como nuevas a las imágenes.
“Las familias tienen la costumbre de que el Niño Jesús tiene que ser un regalo. Me han traído de 30 y 40 años de antigüedad para arreglar”, contó Álex Jallasa.
De ahí que muchas familias opten por la restauración de la imagen en vez de comprar una nueva.
Justina es una de ellas. Ayer llevó una réplica de 50 años que le obsequió una amiga y que en todo este tiempo no tuvo problemas hasta que sus nietos la llevaron a misa la pasada Navidad y volvió con una pierna rota.
El costo de la reparación de una imagen del Niño Jesús depende de los daños. Por lo general, sólo reponer los dedos cuesta de 15 a 20 bolivianos. En tanto, una nueva se puede encontrar desde los 30 a 50. Sin embargo, los más detallados superan los 200 bolivianos.
Sin embargo, el precio no es un factor determinante para renovar o no la imagen, pues lo que prima es el valor sentimental que tiene el Niño para cada familia, como fuente de fe, esperanza, protección y bendición.