Conozca los síntomas para identificar un ictus
Una sonrisa caída, no poder sonreír, pérdida de fuerza en un lado del cuerpo, dolor de cabeza fuerte y repentino, dificultad para entender o hablar, son algunos de los posibles síntomas de un ictus o accidente cerebrovascular. Detectar la sintomatología y actuar con rapidez es vital para evitar posibles secuelas e incluso salvar vidas.
Hoy, es el Día Mundial del Ictus cuyo lema de este año es: “En pie de nuevo tras un ictus”. A nivel mundial, cada año se producen cerca de 17 millones de ictus, los cuales provocan que hasta cinco millones de supervivientes padezcan una discapacidad permanente. Anualmente ocasiona seis millones de decesos.
Un ictus es una enfermedad cerebrovascular. Se produce cuando hay una rotura u obstrucción en un vaso sanguíneo reduciéndose el flujo de sangre que llega al cerebro. Debido a que la sangre no llega al cerebro en la cantidad necesaria, las células nerviosas no reciben oxígeno y dejan de funcionar.
El neurocirujano Iván Flores explica que hay dos tipos de ictus: El isquémico que es cuando hay obstrucción de una arteria y, el hemorrágico cuando hay sangrado de un vaso cerebral.
Comenta que a su consultorio de 10 pacientes que atiende, dos son por accidente cerebrovascular. Señala que dos tercios de los ictus ocurren en personas mayores de 65 años, más en varones que en mujeres.
Síntomas
El especialista explica algunos de los síntomas posibles que puede tener una persona al estar sufriendo un accidente cerebrovascular. Ante la identificación es de vital importancia facilitar la atención lo más rápido posible.
1. Dificultad para hablar o entender. La interrupción del flujo sanguíneo que llega al cerebro puede causar que el afectado tenga dificultades para expresarse (le cuesta articular las palabras o lo que dice no tiene sentido). Se le puede pedir que repita una frase sencilla: Hoy es martes.
2. Adormecimiento de la cara y mitad del cuerpo del mismo lado. La pérdida de sensibilidad en uno de los dos lados de la cara es uno de los síntomas más frecuentes. Esto provoca que, al intentar sonreír, un lado de la boca no se mueva. Asimismo, si al intentar levantar los brazos es imposible hacerlo o uno de los dos cae desplomado, es un síntoma claro de un posible ictus.
3. Alteración de la visión. Puede que la persona afectada vea borroso, doble o que incluso pueda perder la visión de uno o de los dos ojos durante unos momentos.
5. Dolor de cabeza intenso y repentino. Al no recibir sangre ni oxígeno, el cerebro puede quejarse con la aparición de una cefalea intensa sin ninguna causa aparente.
6. Desequilibrio y mareo. Tiene dificultad para caminar o se desequilibra con facilidad.
DATOS
Tras el ictus. Las primeras 3 a 6 horas después de un ictus son claves.
Falta de circulación. Por cada minuto en el que se reduce o detiene la circulación de sangre en el cerebro de una persona se pierden 1,9 millones de neuronas y 14 billones de conexiones neuronales, y una hora sin circulación supone un envejecimiento cerebral de 3,6 años.