La presencia de los políticos en las redes sociales crece, pero sin conectar con la gente
Melina Miller
En un año electoral con varios matices, los políticos bolivianos potencian cada vez más su presencia en los medios y redes sociales, aunque aún no logran consolidar un manejo seguro de su imagen y una interacción efectiva con la ciudadanía.
Analizamos la dinámica de algunos candidatos a la Presidencia de Bolivia desde sus principales cuentas.
Evo Morales- Movimiento Al Socialismo (MAS)
En enero y marzo del año 2018, respectivamente, Evo Morales inauguró sus cuentas oficiales de Facebook e Instagram. El Presidente, que ya estaba activo en Twitter desde abril de 2016, quiso impulsar su imagen ante su aspiración de un cuarto mandato.
El presidente Morales planteó el uso de su cuenta de Facebook como un “canal para construir, para compartir y también para defender los derechos de los pueblos del mundo”. En este sentido se enfoca primordialmente en la gestión gubernamental, exhibición de logros y avances en el plano social, económico y militar, defensa de la Pachamama, entre otros temas. También busca posicionarse como un líder político con raíces indígenas.
En Twitter Morales también promociona su gestión gubernamental y se enfoca en temas locales e internacionales. Utiliza este medio como tribuna para defenderse de lo que él llama "ataques de la derecha”. Twitter es su plataforma más actualizada y su número de seguidores en febrero, superó los 500 mil.
En Instagran su perfil muestra, actualmente casi 35000 seguidores. El manejo de esta red es diferente, más estético mostrando los diferentes paisajes de Bolivia. En más que 300 posts en un año, no se encuentran reacciones muy críticas como ocurre en las otras redes sociales.
Carlos Mesa- Frente Revolucionario de Izquierda (FRI)
Con fuerte preponderancia en Twitter abrió el 2018 su canal de YouTube y página de Facebook.
Realizó el lanzamiento de su candidatura el 6 de octubre por medio del video en su canal “carlosdmesatube”, que tiene actualmente más de 14 mil suscriptores. “Hay un viejo tiempo que se está agotando y que ha cumplido su ciclo. El presidente Morales no es parte del presente, ya no, y mucho menos del futuro, es parte del pasado”, sostuvo en su mensaje.
Su cuenta oficial de Facebook combina imágenes, textos, transmisiones en vivo y artículos periodísticos que destacan un tono positivo su rol de principal de opositor.
En Instagram Mesa es activo desde agosto de 2018, con aproximadamente 5000 seguidores, pero maneja su cuenta de manera personal.
Óscar Ortiz- Bolivia dice No
Óscar Ortiz es muy activo en este sector. Cómo quiere ofrecer la imagen de un candidato joven y diferente, usa estas medidas para llegar especialmente a los jóvenes, que son más y más presentes en Instagram.
Busca ofrecer la imagen de un candidato joven y diferente para llegar especialmente a los jóvenes, que están más presentes en Instagram.
Para el investigador Daniel Moreno, director de Comunidad de Estudios Sociales y Acción Pública (Ciudadana), solo Mesa y Ortiz se presentan como candidatos serios de la oposición.
"Lamentablemente para el pluralismo político del país no existen más que uno y medio candidatos. De los otros no se escucha nada en los medios. Están en la plancha electoral, pero lamentablemente no tienen casi ninguna posibilidad de tener un rol político muy relevante. Tal vez sí, deberíamos considerar a cada uno con calma, cuál es su estrategia, pero en términos prácticos no sirven mucho porque no tienen peso en la intención de voto", explicó.
Las plataformas utilizadas
El experto de marketing y redes sociales, Marcelo Durán, explicó a Los Tiempos que hay tres plataformas claves en este contexto electoral. "Facebook para las masas, Instagram para los jóvenes y Twitter para periodistas, funcionarios, simpatizantes y activistas”.
Un 94 por ciento de los ciudadanos bolivianos utilizan Facebook, según la última encuesta TIC del Estado de las Tecnologías de Información y Comunicación de Bolivia del año 2016. Es la red más utilizada, seguido por WhatsApp con 91 por ciento y YouTube con 40 por ciento. Twitter se encuentra en el cuarto lugar, con 17 por ciento. Sin embargo, todos los candidatos a la presidencia, excepto Ruth Nina del Partido de Acción Nacional Boliviana (PAN–BOL), tienen una cuenta en esta plataforma. “En Bolivia hay dos tendencias marcadas: políticos hablando bien de la gestión de gobierno y políticos hablando mal de la gestión de gobierno”, asegura Durán.
Estrategias en las redes sociales
Moreno asegura que las estrategias se concentran hasta ahora en la persona de Evo Morales, el partido oficialista muestra a su candidato como "la única posibilidad para que el país siga en repunte como en los últimos años", mienstras que "la oposición recuerda las inestabilidades que tiene el MAS y su candidato, particularmente en su camino más o menos autoritario”.
“El error es no ser capaz de convertir ese descontento en propuestas, hablando de la oposición. Tienen una posición solamente reactiva a lo que hace el gobierno y no proponen”, añade Moreno.
En esta misma línea, Durán, explica que “casi ninguno de los políticos habla de sus propuestas, de sus ideas, de sus sueños, de cómo encantar a un público digital que está agotado del fuego cruzado. Un ejemplo es Carlos Mesa, que tiene una buena cantidad de seguidores no tanto por su propuesta, sino porque está en desacuerdo con el Gobierno actual. Es una reacción y no una acción”.
¿Qué tiene que cambiar?
Lo que falta todavía, según los expertos, son propuestas de temas específicos que le interesen a la gente como educación, salud, empleo o el medio ambiente.
Durán manifiesta que falta también “un entrenamiento especializado en coaching y marketing político” para entender que “las redes sociales no son un altoparlante para que la gente escuche su mensaje en alto volumen, sino al contrario, son mesas para sentarse y conversar, escuchar al otro y dialogar”.
Entonces, más que medio millón de seguidores y un público que crece continuamente, no necesariamente significa que los seguidores apoyan a la política, tal vez ni siguiera leen todo lo que está compartido en los canales.
“La gente no quiere ver propaganda. No me imagino a alguien que se levanta diciendo: Veré qué novedades tiene el Ministerio de Energías y su nuevo proyecto de energía nuclear. Si no es relevante ni participativo, el perfil no será tomado en cuenta”, añade el experto en redes sociales.
El rol de las redes sociales en esta campaña electoral
Los expertos todavía no ven estrategias convincentes en cuanto a las elecciones generales: “Hasta la fecha, son sólo "bajadas" de campañas ATL, el spot de TV que se pasa por Facebook, el afiche que se coloca en Instagram, y en Twitter se comparte la nota de prensa. Todavía subyace la lógica del medio tradicional. Pocos saben o entienden el lenguaje digital”, comentó Durán.
En este contexto electoral, Moreno no está convencido de "si estas elecciones se van a decidir en las redes sociales. No sé si eso será el campo de batalla principal, a lo mejor sí, a lo mejor no”.
Al final, la presencia de los políticos en las redes sociales sigue creciendo en el país, igual que en casi todo el mundo. De cierta manera el marketing político se está desarrollando, pero los políticos bolivianos todavía no logran un intercambio verdadero con los ciudadanos. Para esto falta entender que las redes sociales son más que canales para distribuir artículos o propaganda, sino plataformas que exigen un conocimiento profundo de la ciudadanía activa.