Ciudadanos sienten temor, pero salen a las calles por convicción
Las ventas han bajado, los servicios se ven mermados y muchas personas expresan tener temor; mientras otras gritan: “No tenemos miedo”. En las calles hay personas que bloquean por convicción, también aquellas en contra de las medidas y un tercer grupo que sólo desea soluciones.
Luciana (nombre ficticio) tiene miedo identificarse, pues dirige una tienda a la cual amenazaron con saqueos. No le interesan los políticos, sólo quiere soluciones, pues estos días apenas llega a vender por un valor de 100 bolivianos diarios cuando antes superaba los 200, según cuenta.
Situación similar ocurre con la encargada de un taller mecánico en la zona sur. Abre cuando puede llegar desde su vivienda en Santa Bárbara. Sin embargo, casi no tiene clientes, y sus ayudantes hacen el esfuerzo de presentarse cada día, pero se van pronto, pues no hay nada que hacer.
“Que renuncie de una vez el Presidente. Qué tanto se aferra al poder, nos está haciendo daño. Espero que esto se solucione, porque casi no tengo ni un cliente”, dijo la encargada del taller en la zona sur.
En este sector, la gente intenta mantener la normalidad. Si bien hay bloqueos, son en menor proporción que los del centro y norte de la ciudad. La mayor afectación es a la llegada de clientes en los diferentes negocios de la zona.
Entre tanto, en la zona de la Muyurina, hay un grupo de vecinas que llevan 10 días de bloqueos. Cada mañana cumplen con instalar su barricada y la tienen vigilada durante más de 12 horas. Cuentan con orgullo que no responden a ningún partido político ni a las plataformas.
“Ni sé quiénes son los dirigentes. Nosotras bloqueamos por convicción. Estamos aquí porque creemos en la causa, aunque los desbloqueadores quemen nuestras cosas y apedreen nuestras casas”, contó esta barricada conformada en un 90 por ciento por mujeres.
El único varón, un taxista, cuenta que decidió apoyarlas porque la misma gente que bloquea es su clientela. Además, recuerda la lucha en la guerra del agua como la que fue un motor del cambio, aunque lamenta que estas situaciones sean para que un grupo de personas que se debaten el liderazgo y terminen buscando cupos políticos.
“Sólo quiero trabajar”
Finalmente, algunos vecinos de la zona sur también indican estar en contra de las movilizaciones. Empero, aseguran que eso no los convierte en afines al partido de gobierno, aunque reconocen que hay varios que sí lo son.
“No todos los que estamos en contra somos masistas. Yo sólo quiero trabajar. Vivo del día y necesito llevar pan a mi familia. Los políticos siempre están bien, mirando desde sus sillas, casi ninguno viene por estos lugares pobres, sin agua, sin servicios”, lamentó.
El común denominador en estas personas es el temor a decir sus nombres. No querían que se les tomen fotos de frente, o ninguna en absoluto, sólo piden que se cuenten sus historias.
Jornada sin violencia
Luego de varios días de enfrentamientos, Cochabamba vivió una jornada de calma.
Hay puntos donde aún se mantiene la vigilia, como el caso de Cala Cala, Muyurina y la avenida 6 de Agosto, pues son considerados lugares estratégicos por los cuales intentan ingresar personas afines al MAS para desbloquear la ciudad.
10 días de paro consecutivos desde la noche del lunes 21 de octubre, luego de supuestas irregularidades en el conteo de votos en Cochabamba.
DOS ZONAS QUEDARON MARCADAS DE NEGRO
Levantar la vista al cerro San Pedro o pasar por la plazuela de las Banderas supone observar dos zonas emblemáticas con marcas negras por el fuego que sufrieron el martes.
Los enfrentamientos se ensañaron con la serranía del Cristo de la Concordia y un pino en el centro de la ciudad.
La población expresa su repudio cada vez que observa estos dos puntos, cuyos incendios se mantienen impunes por el momento.
CUATRO JÓVENES FUERON ARRESTADOS EN LA ZONA SUR
REDACCIÓN CENTRAL
Cuatro jóvenes fueron arrestados en la avenida Panamericana, al sur de la ciudad, por portar petardos y objetos incendiarios supuestamente. La gente que bloquea en el lugar tiene miedo, pues los arrestados serían parte de los que organizaban en el sector y creen que fueron investigados por inteligencia de la Policía.
Los bloqueadores que acompañaban en el lugar reclamaron por la pasividad de la Policía frente a las agresiones que sufrieron por personas que intentaban retirarlos. Además, luego del arresto, consideran que son ellos los que están siendo observados.
Se trata de un grupo de unas 20 personas que bloquea la avenida Panamericana y también la 6 de Agosto, donde días atrás se vivieron duros enfrentamientos entre cívicos y transportistas. Entre las consecuencias, se tuvo personas heridas, vehículos dañados y portones de casas destrozados con piedras y petardos.