Aterrador siniestro aéreo
Hace 50 años, el 26 de septiembre de 1969, un aterrador siniestro aéreo estremeció a Bolivia. Ese día el avión DC-6B del Lloyd Aéreo Boliviano (LAB) que había decolado en el aeropuerto El Trompillo de Santa Cruz rumbo al aeropuerto de El Alto de La Paz, estalló en pleno vuelo antes de llegar a su destino y se precipitó a una zona montañosa conocida como La Cancha, cerca de la localidad minera de Viloco. En esa terrible tragedia fallecieron los cinco tripulantes y los 69 pasajeros de la aeronave, cuyos restos mutilados y calcinados quedaron dispersos en ese lugar del municipio de Cairoma del departamento de La Paz.
El excelente equipo de tripulantes del LAB estaba conformado por el piloto Teddy Scott Villa, los copilotos Alberto Estrugo y Germán Guzmán y los asistentes de vuelo Carlos Fiorilo y Rosario Vergara. Entre los pasajeros se encontraban meritorias personalidades destacándose la presencia de 16 jugadores titulares del plantel futbolístico de The Strongest junto al cuerpo técnico y la directiva de ese club paceño. Además de otras personalidades también estaban los brillantes periodistas Yerko Garafulic Gutiérrez y Héctor Mejía Arce, con quienes el autor de estas líneas compartió actividades siete años antes en el diario "El Mundo" de Cochabamba. Yerko sobresalió en varios medios de comunicación social y Héctor, además, fue el cerebro del mejor programa radial humorístico de todos los tiempos, denominado "Aquí se raja", que se difundía por la emisora Cultura.
Ese mismo día, el general Alfredo Ovando Candia derrocó al abogado Luis Adolfo Siles Salinas, que se encontraba desempeñando la presidencia de la república, cargo que, siendo vicepresidente, había asumido por sucesión constitucional cuando murió el entonces primer mandatario, general René Barrientos Ortuño.
Mucho tiempo después, en la década de 1990, se denunció que por orden de Alfredo Ovando Candia se había colocado una bomba de alto poder explosivo en la mencionada aeronave ante la presunción de que el mandatario derrocado Luis Adolfo Siles Salinas se embarcaría en ella para trasladarse a La Paz y que intentaría reasumir la presidencia de la república. La misma denuncia señalaba que cuando se supo que Siles Salinas ya había salido al exterior del país en otro vuelo, preguntaron a Ovando qué harían con la bomba y que su respuesta fue: "Dejen las cosas como están".
Esa denuncia fue publicada por el semanario BolivianTimes, que se editaba en La Paz. La misma fue reproducida en la edición del domingo 16 de enero de 1994 de este periódico, Los Tiempos. En esa misma edición se reprodujo un extenso comunicado de los ejecutivos del semanario Bolivian Times que identificaron con todo detalle a las fuentes de tan estremecedora denuncia.
Ahora, después de transcurridas cinco décadas, solamente resta evocar con mucha unción la memoria de los fallecidos en ese aterrador siniestro aéreo. Con ese conmovedor motivo se oficiará una misa este jueves, a la hora 13, en el templo de la Recoleta.
El autor es periodista
Columnas de CARLOS VICENTE REVOLLO HERBAS