Tras desperdiciar agua, Semapa exige a Misicuni instalar válvula
Después de que se desperdiciaron 120 mil litros de agua cruda por el colapso de la planta de Cala Cala, el gerente de Semapa, Gamal Serhan, exigió que la Empresa Misicuni instale de una vez una válvula de regulación en la salid del líquido en el tanque de trasvase de la hidroeléctrica de la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE).
“Hace meses que venimos diciéndole a Misicuni que instale una válvula reguladora, pero no lo hace. Queremos pensar que ése es el motivo por el que ocurrió todo esto y no otro de trasfondo”, afirmó Serhan.
Se estima que se perdieron 120 mil litros en 20 minutos, porque Misicuni envió casi 600 litros por segundo cuando la capacidad de la planta es de 450. Como el caudal sobrepasó las instalaciones, se paralizó el sistema y dejó salir el agua hacia la calle.
El gerente explicó que el contador de agua registró hasta 587 litros por segundo (l/s) ingresando a Semapa al promediar las 9:00. Sin embargo, la planta sólo tiene capacidad hasta 450 l/s, por lo que colapsó y se tuvo que desechar cerca 100 l/s hasta que Misicuni disminuyó el caudal.
El rebalse de la planta provocó que vecinos y comerciantes queden sorprendidos con la especie de cascada que se formó. Varios se reunieron para recoger el agua en baldes, bidones y como podían.
Gamal Serhan reiteró que el rebalse fue porque Misicuni se excedió en el envío. El incidente se suma al registrado la pasada semana en la planta Taquiña, donde se desperdició agua en las pruebas.
Sin embargo, la tensión entre Semapa y Misicuni se remonta a marzo de 2016, cuando, durante la apertura de las compuertas de la represa, se mandó un caudal mayor a la capacidad del ducto y parte de la tubería colapsó.
En tanto, el gerente de Misicuni, Leonardo Anaya, dijo que sólo enviaron 50 l/s más de lo habitual, pues la producción de energía subió, por lo que el embalse de compensación recibió más agua y envió más.
“Llevamos nuestro propio control y, efectivamente, se envió más, pero no hasta 600 l/s. Lo que nosotros creemos es que Semapa dice que tiene capacidad potabilizadora de 450 l/s, pero en realidad debe ser de 400 l/s como para que esto ocurra”, señaló.
Agregó que, según sus registros, el incremento de caudal comenzó a las 5:00 y no a las 9:00. “El operador de Cala Cala debió llamar de manera inmediata cuando vio que entraba más líquido, pero esperaron a que rebalse”, agregó.
Asimismo, el gerente de Misicuni afirmó que pronto se comprará una válvula de última tecnología.
Serhan explicó que con ese dispositivo se regularía de forma automática y uniforme el envío de agua. Entonces, no sería fluctuante según la cantidad de líquido en el embalse de la hidroeléctrica de ENDE.
La población lamentó, en las redes sociales, que se continúe desperdiciando el agua cuando la ciudadanía soporta racionamiento. Mucha gente se aproximó al agua que chorreaba de Semapa, con baldes y botellas para reutilizar.
Mercado de agua
Ante el racionamiento del servicio y el mercado de agua, Serhan dijo que se busca ser lo más equitativo. “La distribución de agua se hace según la cantidad de población y la extensión del área. Tratamos de ser lo más equitativos posible”, afirmó.
Menos caudal por dos horas Semapa solicitó a Misicuni reducir el envío de agua de 430 litros por segundo a 300 durante dos horas hasta limpiar la planta.
OPINIONES
"Hemos estado mandando cartas solicitando 430 litros por segundo y que compren una válvula. Quieren hacer parecer que Semapa no administra bien el agua". Gamal Serhan. Gerente de Semapa
"El operador de Cala Cala no avisó a tiempo y esperaron que comience a rebalsar. No queremos enviar agua para que se pierda, pero la realidad es que su planta no tiene ni la capacidad que dicen". Leonardo Anaya. Gerente Misicuni
LOS VECINOS MARCHAN POR AGUA DE CALIDAD
Los vecinos del sur marcharon en la plaza 14 de Septiembre exigiendo una solución al racionamiento y mejorar la calidad del agua. Los pobladores de la Petrolera expresaron que 2 mil niños están con diarrea.
“Los niños que nacen ya tienen diarrea, es su primera enfermedad”, dijo un vecino.
Los pobladores de esta zona se abasten, esencialmente, de carros cisternas y tanques comunitarios.