Las utilidades de entidades financieras subieron en 9,7% en 2023, según el BCB
Las utilidades de las entidades financieras crecieron en 9,7 por ciento en 2023, comparando con los resultados alcanzados en 2022, informó ayer el Banco Central de Bolivia (BCB), a través del “Informe de estabilidad financiera”. El año pasado, estas entidades generaron utilidades por 2.110 millones de bolivianos, mientras que en 2022 se había logrado 1.924 millones.
Pese a esta cifra positiva y una tendencia creciente que se repite desde 2021, aún no se alcanzaron los niveles prepandemia. En 2019, las entidades financieras habían conseguido utilidades por 2.287 millones (ver infografía).
“Los factores que explicaron el crecimiento de las utilidades fueron el aumento de los ingresos financieros acompañados con una disminución de los gastos financieros”, señala el informe del BCB.
El factor que inclinó la balanza hacia una mayor ganancia para las entidades financieras fue el de los ingresos operativos (aquellos que obtienen por actividades cotidianas), las cuales se incrementaron en 64 por ciento en comparación al año anterior. Estos “generaron un mayor margen en ingresos operativos netos y permitieron alcanzar mejores utilidades para el sistema financiero”, añade el informe.
De esta manera, los ingresos financieros y operativos alcanzaron alrededor de 1.500 millones de bolivianos la pasada gestión.
El presidente del BCB, Edwin Rojas, quien presentó el informe en Sucre, indicó que en el país existen 68 entidades financieras, de las cuales 12 son bancos múltiples, dos son bancos pymes, 41 cooperativas, tres entidades financieras de vivienda y nueve instituciones financieras de desarrollo.
Liquidez y depósitos
Rojas señaló que la liquidez del sistema financiero aumentó de 10 mil millones de bolivianos en 2022 a 13 mil millones el año pasado.
Los depósitos llegaron a 220.862 millones a fines de 2023, esto es un 2 por ciento menos que el año anterior. Según el BCB, el monto de depósitos se mantuvo casi invariable pese a la desaparición del Banco Fassil, que tenía un 9 por ciento de los depósitos a nivel nacional.
La mayor parte de los depósitos, un 48,7 por ciento, está en depósitos a plazo fijo (DPF).
Por otro lado, el número de cuentas de depósitos se incrementó en 7,2 por ciento, llegando a 15,9 millones. Mientras que el número de prestatarios se elevó en 1,7 por ciento, alcanzando a 1,9 millones.
La cartera bruta de créditos llegó a 216.032 millones de bolivianos, ligeramente menor a la de 2022, nuevamente por la desaparición de Fassil.
En 2023 se desembolsaron 82.755 millones de bolivianos en créditos.
OETF tienen 69% del mercado
Las transacciones digitales u órdenes electrónicas de transferencias de fondos (OETF) concentraron el 69 por ciento de las operaciones de pago, de acuerdo con datos del BCB. Esto refleja un aumento de la preferencia de los usuarios por este tipo de nuevas tecnologías que en 2018 llegaban a un 40 por ciento.
Las transacciones por billetera móvil representaron el 12 por ciento; con tarjetas electrónicas, 11 por ciento, y con cheques, 8 por ciento.
Las operaciones procesadas en el sistema de pagos nacional subió en 61 por ciento para montos menores.